Carl Spitzweg.

 

Cuadros fundamentales para entender la historia de la Pintura.

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El poeta pobre (1839). Carl Spitzweg.

Óleo sobre tela. 36 cm x 44 cm.
Pinacoteca Antigua de Múnich. Alemania. (Allí se encuentra la copia “oficial”, ya que el original fue robado).

 

 

Carl Spitzweg suele describir de manera humorística la vida de la pequeña burguesía.

Estamos en Alemania, en el período del estilo Biedermeier.

La pintura de este estilo es la pintura de la sociedad burguesa, que ha tomado el protagonismo luego de la Revolución Francesa, desplazando violentamente a la aristocracia.

Suele reflejar el confort del hogar, el gozo de los sencillos placeres burgueses. Y es a la vez una crítica a aquel pasado dominado por la vida superficial de los poderosos y su gusto recargado y opulento. Por eso se utiliza mucho el recurso de la sátira.

La sátira, en general, es un relato inteligente, agudo, con el que se ridiculiza a una clase social o a un grupo de personas. En la pintura en particular, es un tipo de pintura narrativa (muestra una escena, “cuenta una historia”) que combina el realismo, la denuncia social, con la ironía, con el humor.

Spitzweg nos muestra con gracia la condición del artista en general. Una obra maravillosa y de la que podemos aprender mucho si consideramos un detalle en especial: cómo logra el tono humorístico. Si acaso quitáramos el paraguas, la escena ya no es graciosa, por lo que además deja de ser una sátira y ni siquiera le queda mucha fuerza realista como crítica social.

El detalle de un paraguas: un pequeño elemento que nos lleva a reflexionar sobre la condición del artista, pero que también nos invita a reflexionar sobre el fascinante mundo de los procesos creativos.

Creatividad es el vehículo o el “arma” con que el artista envía su mensaje o su mirada del mundo al receptor. En un extremo, está aquél que utiliza la provocación escandalosa. En el otro, el que sabe conquistar con una sutileza. El primero enamora más rápido. El segundo enamora por más tiempo.

 

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Algunos conceptos elementales sobre el estilo Biedermeier.

Hogarth, el maestro de la sátira en Inglaterra.

Florine Stettheimer y la sátira del consumismo en el siglo XX.

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2 comentarios

Augusto Gonzalez Velasquez · 19 diciembre, 2020 a las 8:50 am

Excelente trabajo

Maria Cristina Rojas · 19 mayo, 2019 a las 10:36 am

No tengo formación en pintura, sin embargo, me gusta mirar pintura y escultura. Fijo mi mirada, primero, en el manejo de la luz y los colores. Estos dos elementos me llevan a las formas. Me gustan lo óleos, las acuarelas y los dibujos con diferente elementos. Por ejemplo, los de Henri de Toulouse Lautrec y algunos de Picasso. Gracias por subir en mi muro bellos cuadros como este. Saludos cordiales.

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