Hausmann.
Cuadros fundamentales para entender la historia de la Pintura.
El crítico de arte (1920). Raoul Hausmann.
Fotomontaje. 31,7 cm x 25,4 cm.
Tate Gallery. Londres, Inglaterra.
El concepto que mejor define a los artistas del dadá como Hausmann es la frase: “Nada es sagrado. A todo le escupimos”.
Hausmann utiliza fotomontaje y recortes de diarios y revistas para transmitir sus ideas con inteligencia, humor, ironía, crueldad y ningún tipo de pudor.
Podemos ver en El crítico de arte algo que se utiliza mucho en el arte dadá: el objeto corriente con un sentido metafórico y/o una función diferente de aquélla para la que fue creado originalmente. Así como la obra más famosa de dadá es el urinal de Duchamp, al que el artista “transforma” con el título en una fuente, aquí el lápiz es una espada.
En este fotomontaje de Hausmann vemos expresada claramente toda la ideología de un movimiento que busca la libertad total del artista, burlándose de todos los valores establecidos, de esas “respetables tradiciones” que en definitiva han llevado al mundo a una guerra absurda y terrible, la Primera Guerra Mundial.
El movimiento rompe con todo lo impuesto y, como es de esperar, empieza enfrentándose a toda convención en la pintura y a la crítica de arte.
Aquí, el crítico tiene un zapato en la cabeza y un billete clavado en la nuca. Absurdo dadá, pero con mucho significado.
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El dadá y las principales características del movimiento.
Otro movimiento que nace con la Primera Guerra Mundial: la pintura metafísica.
La nueva objetividad, el arte alemán que expresa los horrores de la guerra.
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